miércoles, 13 de febrero de 2008

LA PRISIÓN




Hoy, martes 12 de Febrero de 2008, comenzó mi vida normal de 2008, a las 3 de la tarde cuando mi hijo carioca recibió una llamada telefónica en la que le pedían que se presentase a las 5 de la tarde en un evento de esos en los que él es camarero y gana cien reales (unos 50 dólares) por 6 horas de trabajo. Él intentó encontrar quien lo substituyese pero no consiguió entonces se bañó y agarró el primer transporte público que pasó bajando hacia Río de Janeiro capital y al mismo tiempo su mujer salía de su casa para llevarle el uniforme al lugar del evento. Estuvo aquí una semana y ya estoy engripada, creo que me puse triste con su partida además de que ni dormí siesta pues recibí un torpedo (mensaje de texto al celular) de mi nuera de Venezuela preguntándome si me compraba un pasaje de 900 dólares pero como mi celular no tenía suficientes créditos, no pude responderle con otro torpedo, entonces me puse a escribirle un E –mail. Hacía muchísimo calor y ya se lo había escrito y estaba a punto de enviárselo cuando escuché un ruido extraño (dentro del estabilizador de mi computador) seguido de un trueno que me dejó paralizada. Inmediatamente apagué el estabilizador y me fui a la ciudad a un lan house o cyber café a escribirle a mi nuera pidiéndole que entrase en la dirección electrónica donde encontré vuelos por 732 dólares. De regreso a la parada del autobús, al pasar por el lado de unos pordioseros que estaban en las escaleras cubiertas del edificio abandonado donde estuvo el bingo, pensé que ellos no eran criminales, no asaltaban a nadie y por eso eran tan pobres, y además eran libres sobre todo por no estar presos a lo que yo acababa de hacer que era pagar las cuentas de luz y teléfono....y eso que no pago cuenta de agua ni de alquiler. Pero uno mismo se construye su propio presidio y allí se queda hasta el día en que hace como un tío de mi nuera de Venezuela que es ingeniero electrónico y largó todo, familia, casa, carro, empleo, ropas, joyas, remedios, muebles y se fue a vivir una vida pura.

No hay comentarios.: