LA NOVIA
Hoy, sábado 29 de Diciembre de 2007, recibí un email genial de mi prima poeta de Venezuela, que se casó hace 10 días (y que no es la que está en esta foto aquí a la derecha, que se casó hace 10 años, y es la "madrina" alemana de mi segunda hija), y decía más o menos así el email:
¡Hola abuelita poderosa!, gracias por las bendiciones.
Te cuento que todo salió muy bonito, tengo una selección de unas 80 fotos pero no logro comprimirlas aún en un formato en el que pueda enviar por email, cada foto pesa 3 megas aproximadamente, por eso no he podido enviártelas, pero pronto conseguiré la forma y las podrás ver.
Fue una boda muy íntima, la familia y los amigos más cercanos, ese día llovió muchísimo, me pasaron muchas cosas: yo cociné casi todo con la ayuda de mis amigos Bea, Pat y Klaus. Preparamos hallacas, ensalada de gallina y compramos pan de jamón. Había una mesa de quesos, salsas de ajo, de cilantro, queso crema con pimentones, manzanas, cambures, piñas, varios tipos de pan, señoritas, etc. También habían tequeños, bolitas de carne y empanaditas de pollo. Vino tinto y blanco, Whisky, soda, refrescos. La torta la encargué a una pastelería fina con más de 30 años de tradición: una torta con un biscocho muy fresco, relleno de crema pastelera con chocolate y mazapán de cubierta.
Los centros de mesa los hizo mi amiga Claudia Jaimes que es una artista de la vitrofusión, realizó unos Ikebana (arreglos florales japoneses) con aves del paraíso, también me hizo el bouquet con rosas anaranjadas. Los arreglos florales iban en unos platos totalmente hechos a mano en vitrofusión con motivos de aves del paraíso (esos fueron los recuerdos de la boda).
La diseñadora de modas que es la esposa de un escritor amigo mío se pelió con él y no me tuvo listo el vestido de novia, ¿qué tal?, el caso es que me enteré de eso a dos días de la boda, por eso me fui con Claudia a una boutique y me compré un conjunto muy bonito, nada que ver con el diseño original que me había mandado a hacer. El día de la boda tuvimos que trasladar la comida y las bebidas al salón de fiestas en el que esperaba otra amiga y su hermana (ella es productora de eventos de TV) para acomodar todo, ella había recibido la torta, a la agencia de festejos, las flores, a los mesoneros, etc. Luego me fuí a la peluquería y allí me contactó mi amigo Carlos Vega que es fotógrafo profesional, y menos mal, porque subiendo las escaleras, rumbo a hacerme la manicure y pedicure correspondientes me caí con todo mi peso sobre la rodilla derecha (vi las estrellas), pero con las mismas me levanté y me fui a secarme el pelo, maquillarme, etc, etc. Una locura, había alquilado el Hotel Alba Caracas (Antiguo Caracas Hilton) para vestirme y pasar la noche de bodas, fue la mejor inversión, con una lluvia torrencial hubimos de irnos Carlos y yo con sendos paraguas de Bellas Artes al Hotel, donde hube al fin de vestirme y encontrar la calma que me llevaría a mi próxima boda.
(al llegar aquí no aguanté más de emoción y me puse a llorar, pero continué leyendo)
Leo (el novio) ya estaba esperándome, pero pasó que como me retrasé cerca de una hora, el Jefe Civil se había retirado ya, ¿te imaginas?. Torkings había dispuesto cornetas y equipo de Dijey (¿se escribe así?) estaban el padrino (mi tío Guillermo) y la madrina (Claudia Jaimes por supuesto), estaba el novio, la novia y nada de Jefe Civil, lo llamé por teléfono utilizando el tono de voz de una novia angustiada y abandonada, y me dijo que estaba casando a otra pareja, que no me preocupara, que estaría en un ratico, y así fue.
Antes repartimos vino, conversamos, nos saludamos y nos fotografiamos todo lo requerido. Cuando llegaron el Jefe Civil y la Secretaria, todo fue hermosísimo, es más la ceremonia que era civil pasó a ser algo así como un híbrido entre la civil y eclesiástica, puesto que el Jefe Civil daba hasta consejos cristianos, todos los asistentes (hasta mi tío Guillermo que es evangélico), sintieron que esa era una boda mística y que el Jefe Civil había conjugado dos discursos, el legal y el religioso, cosa sumamente extraña, pero fue así. Sara la hija de mi tío Emilio llevó los anillos (no eran Cartier pero como si lo fueran, me costaron lo mismo y son preciosos, ya los verás), y todo transcurrió bellamente. Luego se armó una gran rumba que duró hasta las 1:30 am (a esa hora picamos la torta), pero hubo quienes se quedaron hasta las 4:30 am, nosotros nos fuimos a las 3:00 am.
Lo disfruté mucho, aún ando organizando fotos y buscando el lugar para imprimirlas lo mejor que se pueda- Espero que tengas un muy feliz fin de año y un próspero año 2008, dale mis cariños a mis primos brasileños. Hiciste mucha falta, pero se que pronto nos veremos, cariños, (al llegar aquí no aguanté más de emoción y me puse a llorar, pero continué leyendo).
